Censo
Últimos temas
Noticias
Afiliados normales
Mar de Jaspia es un foro basado en un mundo original con líneas argumentales que pertenecen a sus administradores y participantes. Tanto los escritos como el diseño están protegidos por una licencia Creative Commons. Algunos códigos fueron desarrollados por el equipo web de Protorol. La mayoría de nuestras imágenes son sacadas de DeviantArt y retocadas, si quieres créditos propios o te interesa alguna imagen en concreto, haznoslo saber.
KirillAdmin ♒ MP!
ChelsieAdmin ♒ MP!
LisandotMod ♒ MP!
DelinMod ♒ MP!
SophitiaColab ♒ MP!
CyrianColab ♒ MP!
Años Activos
El tesoro minero (libre)
3 participantes
Mar de Jaspia :: DUCADO DE CESSELE :: Kuzueth :: Daosh
Página 1 de 1.
El tesoro minero (libre)
Para mi lugar de exilio habia elegido la isla de Kuzueth por una razon: sus abundantes minerales, para mi profesion era la isla perfecta.
Algunos dias despues de mi llegada, cuando estaba yo ya medianamente asentado fui a visitar a kurruth, un viejo amigo de mi maestro. Los pobladores del lugar me dijeron que vivia al norte de Daosh en una casa arriba de una colina.
Toque la puerta y del otro lado de ella aparecio un enano de cabellos rojizos y ojos alegres. me presente y me invito a pasar amablemente
-siento lo de tu maestro Burd, pero estas cosas pasan.
-si ya se, pero ahora si que estoy solo, no se que hacer
-yo no puedo tenerte en casa aunque quisisera. tenga bastantes problemas con la ley, y estos se agravarian si descubrena un exiliado viviendo en mi techo
-lo entiendo y no te preocupes, lo que necesito ahora es algo en que ocupar el tiempo y algun trabajillo para ganarme la vida.
el enano se levanto y fue empezo a revolver los papeles que tenia en el armario
-tu maestro me dijo que si algun dia salias de viaje, vendrias a esta isla por su relacion con tu profesion, y me encargo darte esto- me dio un viejo mapa
-de que es este mapa?
-es un anitguo mapa encontrado por amigos de tu padre. en el se encuentran las indicaciones para llegar al fonde de la mina de Garrajin. hace muchos años un grupo de mineros descubrio un gigantesco deposito de cobre y acero en lo mas profundo de las montañas, pero su afan por excavar termino enterrandolos vivos a todos. Amgiso de tu padre descubrieron una via para entrar al deposito de la mina, pero este camino era muy peligroso para unos pobres mineros enanos. los que fueron volvieron aterrorizados, decian que lo custodiaban los espiritus de los mineros muertos. yo te regalo el mapa, a mi no me sirve, estoy muy viejo para estas andanzas, pero vos sos joven y es la oportunidad que necesitas. no te atrevas a ir solo, necesitas un grupo de hombres que te acompañe en esa dificil travesia.
sali de la casa de Kurruth y fui directamente al cartel de anuncios de la taberna a pegar un cartel para reclutar valientes para realizar la dificil mision. deje dicho que lo que encontremos abajo lo repartiriamos en partes iguales entre los que fueran a la mina y que los interesados se dirigieran a la habitacion en el hostal donde me encontraba hospedado. fui a la taberna y me pedi una botella de licor de miel, luego de esto me diriji a mi habitacion y me sente a esperar, con mi botella, que alguien se presentara para la tarea. lo que habia abajo en la mina debia ser muy valioso como para morir por ello.
Algunos dias despues de mi llegada, cuando estaba yo ya medianamente asentado fui a visitar a kurruth, un viejo amigo de mi maestro. Los pobladores del lugar me dijeron que vivia al norte de Daosh en una casa arriba de una colina.
Toque la puerta y del otro lado de ella aparecio un enano de cabellos rojizos y ojos alegres. me presente y me invito a pasar amablemente
-siento lo de tu maestro Burd, pero estas cosas pasan.
-si ya se, pero ahora si que estoy solo, no se que hacer
-yo no puedo tenerte en casa aunque quisisera. tenga bastantes problemas con la ley, y estos se agravarian si descubrena un exiliado viviendo en mi techo
-lo entiendo y no te preocupes, lo que necesito ahora es algo en que ocupar el tiempo y algun trabajillo para ganarme la vida.
el enano se levanto y fue empezo a revolver los papeles que tenia en el armario
-tu maestro me dijo que si algun dia salias de viaje, vendrias a esta isla por su relacion con tu profesion, y me encargo darte esto- me dio un viejo mapa
-de que es este mapa?
-es un anitguo mapa encontrado por amigos de tu padre. en el se encuentran las indicaciones para llegar al fonde de la mina de Garrajin. hace muchos años un grupo de mineros descubrio un gigantesco deposito de cobre y acero en lo mas profundo de las montañas, pero su afan por excavar termino enterrandolos vivos a todos. Amgiso de tu padre descubrieron una via para entrar al deposito de la mina, pero este camino era muy peligroso para unos pobres mineros enanos. los que fueron volvieron aterrorizados, decian que lo custodiaban los espiritus de los mineros muertos. yo te regalo el mapa, a mi no me sirve, estoy muy viejo para estas andanzas, pero vos sos joven y es la oportunidad que necesitas. no te atrevas a ir solo, necesitas un grupo de hombres que te acompañe en esa dificil travesia.
sali de la casa de Kurruth y fui directamente al cartel de anuncios de la taberna a pegar un cartel para reclutar valientes para realizar la dificil mision. deje dicho que lo que encontremos abajo lo repartiriamos en partes iguales entre los que fueran a la mina y que los interesados se dirigieran a la habitacion en el hostal donde me encontraba hospedado. fui a la taberna y me pedi una botella de licor de miel, luego de esto me diriji a mi habitacion y me sente a esperar, con mi botella, que alguien se presentara para la tarea. lo que habia abajo en la mina debia ser muy valioso como para morir por ello.
burdalesa- Cantidad de envíos : 49
Re: El tesoro minero (libre)
Dalatar leyó despacio el anuncio que le tendió el joven herrero, sin dejar de rascarse la cabeza. Como todo le pareció conforme, cobró a Burdalesa los pocos cobres que costaba fijar en anuncio en una de las paredes, y se desentendió completamente del asunto. Luego de darle la botella de hidromiel, y la pesada llave que abría su habitación, se fijó durante unos momentos en su llamativa cresta, aunque no dijo nada sobre ello. "Sin duda no os costará mucho encontrar aventureros dispuestos a acompañaros en vuestra búsqueda, pero debo advertiros de que la junga es un lugar peligroso de verdad."
De camino a su habitación, se cruzó con Karis, pero ésta lo esquivó ágilmente sin derramar ni una gota de cerveza de las cuatro jarras que llevaba en su bandeja, y tuvo hasta tiempo suficiente para sonreírle de una manera tan encantadora como solo ella sabía hacer.
FDI: Suerte, maese, espero que se una alguien a su aventurilla ! Para su información, toda la explotación minera pertenece al conde Einon, y está fuertemente vigilada. La veta oculta que dice usted sigue siendo secreta, a ver como se las arregla usted una vez la haya encontrado !
De camino a su habitación, se cruzó con Karis, pero ésta lo esquivó ágilmente sin derramar ni una gota de cerveza de las cuatro jarras que llevaba en su bandeja, y tuvo hasta tiempo suficiente para sonreírle de una manera tan encantadora como solo ella sabía hacer.
FDI: Suerte, maese, espero que se una alguien a su aventurilla ! Para su información, toda la explotación minera pertenece al conde Einon, y está fuertemente vigilada. La veta oculta que dice usted sigue siendo secreta, a ver como se las arregla usted una vez la haya encontrado !
Narrador- Cantidad de envíos : 157
Re: El tesoro minero (libre)
No podía sentirme más feliz ni aunque lo intentara. Pisar Kuzueth, lejos de esos ipoq, era algo realmente placentero, sobre todo teniendo en cuenta el desafío que eso había significado. Hubiese jurado que iba a morir allí, pero por quién sabe qué caprichos del destino, allí me encontraba, en Kuzueth, y con mi alma intacta. Me acerqué a una taberna para conseguir algo de comida, y quizás repetir la estrategia de Denke, de trabajar para conseguir la estadía.*
-Deberías hacerme caso, estúpida, y andar sola. Te ha ido mucho mejor cuando hiciste las cosas por tu cuenta.
-Sí, lo sé. Pero no podía dejarlo solo después de que casi lo matas... -mi vista se fijó en un cartel pegado en el vidrio de la taberna. Lo observé con la esperanza de encontrar trabajo en él, pero lo que encontré no fue eso. Al menos, no era exactamente trabajo. -Mira, Iby, podemos formar parte de esto.
-No. ¡¿Qué diablos acabo de decirte?!
-Sé lo que dijiste, y estoy de acuerdo. Pero... podría conseguir recursos suficientes como para no perder demasiado tiempo en las ciudades. Incluso podría comprar algunas cosas... Yo voy a preguntar -sentencié por una sonrisa, para luego entrar a la taberna. Al preguntar, fui dirigida a una habitación. Poco después, me encontraba frente a la puerta, con Iby protestando junto a mí. -¿Hay alguien? -pregunté luego de golpear suavemente la puerta con mi puño, para llamar.
-Algún degenerado, seguramente...
*FDI= Como dije antes, la introducción puede estar sujeta a modificaciones, pero nada que realmente afecte esta trama.
-Deberías hacerme caso, estúpida, y andar sola. Te ha ido mucho mejor cuando hiciste las cosas por tu cuenta.
-Sí, lo sé. Pero no podía dejarlo solo después de que casi lo matas... -mi vista se fijó en un cartel pegado en el vidrio de la taberna. Lo observé con la esperanza de encontrar trabajo en él, pero lo que encontré no fue eso. Al menos, no era exactamente trabajo. -Mira, Iby, podemos formar parte de esto.
-No. ¡¿Qué diablos acabo de decirte?!
-Sé lo que dijiste, y estoy de acuerdo. Pero... podría conseguir recursos suficientes como para no perder demasiado tiempo en las ciudades. Incluso podría comprar algunas cosas... Yo voy a preguntar -sentencié por una sonrisa, para luego entrar a la taberna. Al preguntar, fui dirigida a una habitación. Poco después, me encontraba frente a la puerta, con Iby protestando junto a mí. -¿Hay alguien? -pregunté luego de golpear suavemente la puerta con mi puño, para llamar.
-Algún degenerado, seguramente...
*FDI= Como dije antes, la introducción puede estar sujeta a modificaciones, pero nada que realmente afecte esta trama.
Tsuki Umi- Cantidad de envíos : 127
Re: El tesoro minero (libre)
Estaba tirado en mi cama divagando sobre mi situacion economica. Las cosas no iban bien, nadie me contrataba y mi mision minera no habia recibido a nadie para acompañarme, debia. Era demasiado arriesgado para cualquiera aventurarse en una mina abandonada, pero mi situacion era desesperada. De repente escuche el sonido de alguien tocando mi puerta. Abri esperando ver al tabernero o alguien del servicio del lugar pero aparecio frente a mi una chica de pelo estraño y con cara de niña, obviamente estaba muy sorprendido.
No parecia trabajar en el lugar y no podia decifrar que era lo que queria.
-em, hola... que desea señorita? ¿que la trae a visitar los aposentos de un desconocido?
No parecia trabajar en el lugar y no podia decifrar que era lo que queria.
-em, hola... que desea señorita? ¿que la trae a visitar los aposentos de un desconocido?
burdalesa- Cantidad de envíos : 49
Re: El tesoro minero (libre)
Esperé poco tiempo luego de golpear. Cuando la puerta se abrió, encontré del otro lado a un hombre joven, de aspecto fuerte y un cabello realmente extraño. Me recordaba a los relatos de mi maestro, en los que hablaba de algunas de sus hazañas en el reino del que provenía, y tuve deseos de preguntarle si conocía a mi maestro, pero decidí no hacerlo. Iby parecía tener ganas de destriparlo allí mismo, así que decidí que lo mejor sería hablar rápido.
-Eh... sí. Vi un cartel en la taberna, sobre una expedición a una mina abandonada, y el tabernero me dijo que pregunte aquí. Me... me interesaría formar parte.
-Sí, no pienses que... -Un golpe seco le advirtió a Iby que debía callarse. No quería tener problemas otra vez. Detestaba tenerlos.
-Él es Iblagia, mi compañero... Sí, mi compañero -añadí luego de pensar un rato-. Uno de esos que no se sabe si son aliados o enemigos. Y mi nombre es Tsuki.
-Una mediocre -refunfuñó Iby. Sonreí al chico que me había recibido. Sin duda, una primera impresión, al menos, curiosa.
-Eh... sí. Vi un cartel en la taberna, sobre una expedición a una mina abandonada, y el tabernero me dijo que pregunte aquí. Me... me interesaría formar parte.
-Sí, no pienses que... -Un golpe seco le advirtió a Iby que debía callarse. No quería tener problemas otra vez. Detestaba tenerlos.
-Él es Iblagia, mi compañero... Sí, mi compañero -añadí luego de pensar un rato-. Uno de esos que no se sabe si son aliados o enemigos. Y mi nombre es Tsuki.
-Una mediocre -refunfuñó Iby. Sonreí al chico que me había recibido. Sin duda, una primera impresión, al menos, curiosa.
Tsuki Umi- Cantidad de envíos : 127
Re: El tesoro minero (libre)
La joven que acudio a mi humilde habitacion queria formar parte de la expedicion. Ademas de ella tambien participaria su acompañante, un lagarto bastante malhumorado que yo no parecia caerle bien. En una situacion normal rechazaria su ayuda ya que parecia muy pequeña y el bicho ese no me gustaba nada, pero como era la unica que habia acudido decidi aceptarla en la mision.
Invite a pasar a la chica, le ofreci sentarse en una silla de madera a medio podrirse y le ofreci un poco de ron de dudosa procedencia.
-Encantado de conocerla señorita Tsuki. Mi nombre es Burdalesa y le pasare a informar sobre la expedicion que vamos a realizar. Consegui la informacion de una fuente bastante confiable, esta revela que a seis horas de caminata de este lugar hay una zona de las minas que parecia bloqueada, pero un grupo de enanos descubrio como entrar al lugar. Otros ya lo intentaron y no resultaron victoriosos, al parecer esta en muy mal estado y los espiritus de todos los mineros muertos custodian el lugar. Esta mision vale la pena ya que hay un gran deposito de minerales preciosos ya extraidos, solo tendriamos que tomarlos y luego repartirlos mitad yo y mitad vos. Tambien debo advertirle que nos deberemos meter en propiedad privada de un Conde, y no creo que esto le guste, deberemos tomar muchas precauciones.
hice una breve pausa para aclarar las ideas y beber el humillante ron.
Le acabo de contar a grandes rasgos lo que tendriamos que hacer, ahora le pregunto: ¿usted y su compañero se sienten capaces y creen que vale la pena tomar el riesgo? Si es asi le agracezco y le doy la bienvenida a esta peligrosa empresa.- dije esto tendiendole la mano y con un a gran sonrisa en el rostro.
Invite a pasar a la chica, le ofreci sentarse en una silla de madera a medio podrirse y le ofreci un poco de ron de dudosa procedencia.
-Encantado de conocerla señorita Tsuki. Mi nombre es Burdalesa y le pasare a informar sobre la expedicion que vamos a realizar. Consegui la informacion de una fuente bastante confiable, esta revela que a seis horas de caminata de este lugar hay una zona de las minas que parecia bloqueada, pero un grupo de enanos descubrio como entrar al lugar. Otros ya lo intentaron y no resultaron victoriosos, al parecer esta en muy mal estado y los espiritus de todos los mineros muertos custodian el lugar. Esta mision vale la pena ya que hay un gran deposito de minerales preciosos ya extraidos, solo tendriamos que tomarlos y luego repartirlos mitad yo y mitad vos. Tambien debo advertirle que nos deberemos meter en propiedad privada de un Conde, y no creo que esto le guste, deberemos tomar muchas precauciones.
hice una breve pausa para aclarar las ideas y beber el humillante ron.
Le acabo de contar a grandes rasgos lo que tendriamos que hacer, ahora le pregunto: ¿usted y su compañero se sienten capaces y creen que vale la pena tomar el riesgo? Si es asi le agracezco y le doy la bienvenida a esta peligrosa empresa.- dije esto tendiendole la mano y con un a gran sonrisa en el rostro.
burdalesa- Cantidad de envíos : 49
Re: El tesoro minero (libre)
El muchacho que me recibió parecía ser alguien amable, y no un degenerado como pensaba Iby. Ante su ofrecimiento, me dispuse a tomar asiento y me crucé de piernas, y entonces llegó la ofrenda de ron.
-No, gracias. No bebo alcohol.
Comentar que papá decía que el alcohol debilitaba los poderes me parecía algo indeseable en aquella ocasión. Escuché con atención las palabras del joven Burdalesa, y cuando mencionó que estaba custodiado por espíritus miré a Iby, con la esperanza de que él supiese algo, pero no parecía estar interesado en lo que el joven decía. ¿Propiedad privada de un conde? Eso no era problema alguno. Debíamos asegurarnos de entrar allí, y ver cómo saldríamos, pero evitar ser descubiertos no supondría un problema... Corregí mis pensamientos inmediatamente: no debería suponer un problema.
-No tengo dudas de que Iby se siente capaz, y yo creo que puedo ser de mucha ayuda. Sería algo bastante provechoso, y si tenemos éxito, eso podría garantizarme varios meses de descanso. Nunca pude dedicarme a mí el tiempo que me gustaría.
-No le cuentes la historia de tu vida, estúpida.
-¡Cierra la boca, renacuajo con patas! Yo le contaré a la gente lo que yo quiera contarle sobre mí, y si no te gusta ya puedes largarte, iguana de feria.
-Cuida el tono con el que te diriges a mí, pirómana de cuarta.
Y así, se repitió el ritual nuestro de cada día. Era sólo cuestión de tiempo para que empezáramos a pelear con palabras, y era sólo cuestión de tiempo para que eso derivara en un bastonazo de mi parte, o un puñetazo o patada de Iby. En este caso, fue casi un empate. Él dirigió su pie hacia mis canillas, mientras que mi bastón fue directo a su cabeza. Ambos expresamos un "¡Au!" de dolor al mismo tiempo, y yo me froté la pierna con mi mano libre mientras que él llevó su mano a su nuca, y nos miramos con una expresión intermedia entre dolor y rabia. Nuevamente sentí que la persona que tenía frente a mí me consideraría una inepta, como sucedía cada vez que me peleaba con Iby.
-Mi defecto es este lagarto, que se supone que debería ser una de mis virtudes.
-No soy nada tuyo, cabeza hueca.
La historia se repitió. Sólo esperaba que Burdalesa no rechazara mi reclutamiento sólo por un detalle como ese.
-No, gracias. No bebo alcohol.
Comentar que papá decía que el alcohol debilitaba los poderes me parecía algo indeseable en aquella ocasión. Escuché con atención las palabras del joven Burdalesa, y cuando mencionó que estaba custodiado por espíritus miré a Iby, con la esperanza de que él supiese algo, pero no parecía estar interesado en lo que el joven decía. ¿Propiedad privada de un conde? Eso no era problema alguno. Debíamos asegurarnos de entrar allí, y ver cómo saldríamos, pero evitar ser descubiertos no supondría un problema... Corregí mis pensamientos inmediatamente: no debería suponer un problema.
-No tengo dudas de que Iby se siente capaz, y yo creo que puedo ser de mucha ayuda. Sería algo bastante provechoso, y si tenemos éxito, eso podría garantizarme varios meses de descanso. Nunca pude dedicarme a mí el tiempo que me gustaría.
-No le cuentes la historia de tu vida, estúpida.
-¡Cierra la boca, renacuajo con patas! Yo le contaré a la gente lo que yo quiera contarle sobre mí, y si no te gusta ya puedes largarte, iguana de feria.
-Cuida el tono con el que te diriges a mí, pirómana de cuarta.
Y así, se repitió el ritual nuestro de cada día. Era sólo cuestión de tiempo para que empezáramos a pelear con palabras, y era sólo cuestión de tiempo para que eso derivara en un bastonazo de mi parte, o un puñetazo o patada de Iby. En este caso, fue casi un empate. Él dirigió su pie hacia mis canillas, mientras que mi bastón fue directo a su cabeza. Ambos expresamos un "¡Au!" de dolor al mismo tiempo, y yo me froté la pierna con mi mano libre mientras que él llevó su mano a su nuca, y nos miramos con una expresión intermedia entre dolor y rabia. Nuevamente sentí que la persona que tenía frente a mí me consideraría una inepta, como sucedía cada vez que me peleaba con Iby.
-Mi defecto es este lagarto, que se supone que debería ser una de mis virtudes.
-No soy nada tuyo, cabeza hueca.
La historia se repitió. Sólo esperaba que Burdalesa no rechazara mi reclutamiento sólo por un detalle como ese.
Tsuki Umi- Cantidad de envíos : 127
Re: El tesoro minero (libre)
La joven y su extraño acompañante, que debia ser un espiritu comenzaron a pelear como dos niños. Al principio me parecio que era un juego o algo asi, hasta era divertido, pero luego no me guysto nada y pense que le haria daño a la chica asi que agarre al bicho por las patas muy rapidamente y lo arroje al otro lado de la habitacion, para luego sacar la espada y ponerme en frente de la chica.
-No debes tratar asi a una mujer! y menos a tu ama!
-dirijiendome a la chica dije- ¿estas bien, te hizo mucho daño? tengo un botiquin bajo la cama si lo necesitas¿ es normal que un espiritu se revele asi contra su invocador? Si no puedes controlar a tu lagarto no creo que sea conveniente llevarlos, me parece poco sigiloso.
con un lagarto y una jovencita pelandose no me parecia la mejor manera de entrar a una mina dominada por espiritus y condes, ademas la cosa esa podia llegar a atacarnos. No era la mejor pareja para ir de avenutra, pero no me quedaba otra.
-No debes tratar asi a una mujer! y menos a tu ama!
-dirijiendome a la chica dije- ¿estas bien, te hizo mucho daño? tengo un botiquin bajo la cama si lo necesitas¿ es normal que un espiritu se revele asi contra su invocador? Si no puedes controlar a tu lagarto no creo que sea conveniente llevarlos, me parece poco sigiloso.
con un lagarto y una jovencita pelandose no me parecia la mejor manera de entrar a una mina dominada por espiritus y condes, ademas la cosa esa podia llegar a atacarnos. No era la mejor pareja para ir de avenutra, pero no me quedaba otra.
burdalesa- Cantidad de envíos : 49
Re: El tesoro minero (libre)
-¡NO!
Fue todo lo que atiné a decir cuando Burdalesa arrojó así a Iby, pero ya era demasiado tarde para aconsejar. El joven ya había actuado, y realmente tenía mis dudas sobre la buena reacción de mi compañero ante tal acción y tales palabras. Y en efecto, su respuesta no se hizo esperar. Se levantó, miró fijamente a quien, de cierta manera, me defendió, y no noté odio en sus ojos. En lugar de eso, pude prácticamente leer una sentencia de muerte. Nunca había visto a Iby matar una persona, pero si alguien me preguntaba si lo creía capaz, no dudaba en responder que sí. No era un espíritu como los demás.
-¿Mi ama? ¿Estás diciendo que esa mocosa es mi ama, excavador frustrado? No soy un lagarto, para tu información, humano ignorante. Soy un espíritu acuático. Uno de los más poderosos que existen.
Mi adorno se transformó en una enorme cantidad de cuchillos de hielo que se dirigieron a Burdalesa, no con el fin de asesinarlo, en apariencia, sino dirigidos a sus piernas. Fueron demasiado rápidos, intenté evaporarlos tan rápido como pude, pues era preferible que el joven sintiera mucho calor recorrer temporalmente sus piernas, en lugar de que se llenara de agujeros por unos proyectiles que atravesaran sus extremidades.
-¡Iby, basta ya! ¡Por favor!
Fue todo lo que atiné a decir cuando Burdalesa arrojó así a Iby, pero ya era demasiado tarde para aconsejar. El joven ya había actuado, y realmente tenía mis dudas sobre la buena reacción de mi compañero ante tal acción y tales palabras. Y en efecto, su respuesta no se hizo esperar. Se levantó, miró fijamente a quien, de cierta manera, me defendió, y no noté odio en sus ojos. En lugar de eso, pude prácticamente leer una sentencia de muerte. Nunca había visto a Iby matar una persona, pero si alguien me preguntaba si lo creía capaz, no dudaba en responder que sí. No era un espíritu como los demás.
-¿Mi ama? ¿Estás diciendo que esa mocosa es mi ama, excavador frustrado? No soy un lagarto, para tu información, humano ignorante. Soy un espíritu acuático. Uno de los más poderosos que existen.
Mi adorno se transformó en una enorme cantidad de cuchillos de hielo que se dirigieron a Burdalesa, no con el fin de asesinarlo, en apariencia, sino dirigidos a sus piernas. Fueron demasiado rápidos, intenté evaporarlos tan rápido como pude, pues era preferible que el joven sintiera mucho calor recorrer temporalmente sus piernas, en lugar de que se llenara de agujeros por unos proyectiles que atravesaran sus extremidades.
-¡Iby, basta ya! ¡Por favor!
Tsuki Umi- Cantidad de envíos : 127
Re: El tesoro minero (libre)
Iby no parecia muy contento con mi intervencion, pero no podia hacer otra cosa cuando atacaban a una jovencita. La criatura me miraba como si yo ya estuviera muerto, esto era muy probable ya que me enfrentaba con un espiritu bastante temperamental. De repente se materializaron cientos de navajas echas con hielo que se lanzaron directamente hacia mis piernas. Con gran reflejo logre ver el ataque para poder realizar mi maniobra. Salte lo mas alto que pude y gire mi espada hacia abajo. Ya que mi espada esta encantada con el fuego deje un circulo de llamas abajo de mis piernas y logre destruir casi todos los cuchillos, excepto por algunos que rozaron mis piernas dejandome heridas de ligera gravedad. Cai al piso y me puse en posicion de nuevo. El lagarto parecia sorprendido de que haya podido evitar la mayor parte de su ataque.
-No quiero pelear contigo, pero no podia permitir que le hagas daño a un chica tan joven. Lamento si te eh respondido mal, pero es mi forma de ser impetuosa que me llevo a obrar asi. Si te comportas asi no puedo llevarlos a las minas, es un riesgo que no pienso correr. Todavia creo que es beneficioso para los tres realizar esta empresa, pero necesito que te calmes. Si no lo quieres, no tengo problema en seguir luchando, no creo que me ganes facilmente.
Sujete con toda mi fuerza la espada y me prepare para esquivar y atacar luergo del siguienbte ataque, aunque rogaba porque se tranquilizara.
-No quiero pelear contigo, pero no podia permitir que le hagas daño a un chica tan joven. Lamento si te eh respondido mal, pero es mi forma de ser impetuosa que me llevo a obrar asi. Si te comportas asi no puedo llevarlos a las minas, es un riesgo que no pienso correr. Todavia creo que es beneficioso para los tres realizar esta empresa, pero necesito que te calmes. Si no lo quieres, no tengo problema en seguir luchando, no creo que me ganes facilmente.
Sujete con toda mi fuerza la espada y me prepare para esquivar y atacar luergo del siguienbte ataque, aunque rogaba porque se tranquilizara.
burdalesa- Cantidad de envíos : 49
Re: El tesoro minero (libre)
Burdalesa parecía ser un hombre bastante gentil y caballero. Esa era la impresión que me daban sus palabras. No me sentía halagada por sus palabras, pero tampoco era que me sintiera ofendida. No tenía por qué estarlo, excepto quizás porque Burdalesa considerara que no podía defenderme sola, pero teniendo en cuenta que acababa de conocerme, consideraba que estaba en todo su derecho de pensar eso.
-Tranquilo, señor Burdalesa. No hace falta tanta violencia, puede solucionarse pacíficamente. -Desmaterialicé mi bastón, y dirigí ambas manos hacia la empuñadura de la espada de Burdalesa, con el objetivo de tranquilizarlo. -Iby, basta ya. ¿Podemos estar en paz con una persona al menos?
-Sí, pero no veo por qué comenzar con este proyecto de ser vivo.
-¿Por qué no? En algún momento también fuiste un proyecto de ser vivo, y si vamos al caso quizás ni siquiera eres uno.
Iby me dirigió una mirada asesina. Estaba segura de que aguardaría a que estuviésemos en la mina para hacer notar su desencanto profundo con ese joven, pero tenía la esperanza de, para entonces, lograr calmarlo. Iby le dio la espalda a Burdalesa, un gesto de evidente mala educación. No era necesario conocer a mi familiar para comprender que ese gesto estuvo cargado de desprecio. Desprecio no sólo a Burdalesa, sino también a mí, ya que me encontraba junto a él.
-Entonces apresúrate. Ese tesoro no vendrá a ti, idiota.
-Tranquilo, señor Burdalesa. No hace falta tanta violencia, puede solucionarse pacíficamente. -Desmaterialicé mi bastón, y dirigí ambas manos hacia la empuñadura de la espada de Burdalesa, con el objetivo de tranquilizarlo. -Iby, basta ya. ¿Podemos estar en paz con una persona al menos?
-Sí, pero no veo por qué comenzar con este proyecto de ser vivo.
-¿Por qué no? En algún momento también fuiste un proyecto de ser vivo, y si vamos al caso quizás ni siquiera eres uno.
Iby me dirigió una mirada asesina. Estaba segura de que aguardaría a que estuviésemos en la mina para hacer notar su desencanto profundo con ese joven, pero tenía la esperanza de, para entonces, lograr calmarlo. Iby le dio la espalda a Burdalesa, un gesto de evidente mala educación. No era necesario conocer a mi familiar para comprender que ese gesto estuvo cargado de desprecio. Desprecio no sólo a Burdalesa, sino también a mí, ya que me encontraba junto a él.
-Entonces apresúrate. Ese tesoro no vendrá a ti, idiota.
- FDI:
- Mil perdones por la tardanza
Tsuki Umi- Cantidad de envíos : 127
Re: El tesoro minero (libre)
Al ver que la cosa parlanchina se calmaba baje mi espada y volvi a enfundarla.
-bueno, dejemos esta pelea en el pasado y arreglemos este viaje. Tengo un conocido que puede llevar a las cercanias de la mina, nos dejaria aproximadamente a dos kilometros y esperaria nuestra vuelta, a menos que tenga problemas o esta fuese muy larga.
Yo tengo que preparar mis cosas y comprar algunas provisiones que me faltan, como una soga y algo mas de alimento y agua ya que el pico lo tengo aqui mismo. Si ustedes estan mas o menos preparados nos encontraremos en una hora en la plaza central, donde nos esperara la carreta. Esta de acuerdo señorita?
En el momento de la pelea con el espiritu habia pensado seriamente en despacharlos e impedir que me acompañaran, pero el reptil parecia fuerte y seria util si venian a atacarnos los hombres del conde. La chica no aparentaba demasiado poder ni control, pero supuse que para invocar semejante ser se necesitaba un gran conocimiento magico. Esto sumado a mi ya mencionado estado economico me obligaban a partir lo mas rapido posible.
-bueno, dejemos esta pelea en el pasado y arreglemos este viaje. Tengo un conocido que puede llevar a las cercanias de la mina, nos dejaria aproximadamente a dos kilometros y esperaria nuestra vuelta, a menos que tenga problemas o esta fuese muy larga.
Yo tengo que preparar mis cosas y comprar algunas provisiones que me faltan, como una soga y algo mas de alimento y agua ya que el pico lo tengo aqui mismo. Si ustedes estan mas o menos preparados nos encontraremos en una hora en la plaza central, donde nos esperara la carreta. Esta de acuerdo señorita?
En el momento de la pelea con el espiritu habia pensado seriamente en despacharlos e impedir que me acompañaran, pero el reptil parecia fuerte y seria util si venian a atacarnos los hombres del conde. La chica no aparentaba demasiado poder ni control, pero supuse que para invocar semejante ser se necesitaba un gran conocimiento magico. Esto sumado a mi ya mencionado estado economico me obligaban a partir lo mas rapido posible.
burdalesa- Cantidad de envíos : 49
Re: El tesoro minero (libre)
-Por mí no hay ningún tipo de problema, señor.
Evidentemente Iby estaba causando más problemas que los que solucionaba, si es que solucionaba alguno. Parecía imposible ese sueño que tenía de ser obedecida por aquel espíritu acuático. Una utopía, eso parecía. Un sueño de esos que soñaría durante toda la vida, y nunca se llevarían a cabo. Sabía que Iby estaba obligado a acompañarme hasta que pudiese crecer, pero viendo el día a día ya me imaginaba usando mi báculo como bastón y aún soportando al espíritu que me acompañaba, tal cual era en ese mismo momento.
-Nos veremos allí entonces. Vamos, Iby.
No mucho después de eso, salí junto a Iby de la taberna, sonriéndole brevemente al posadero. Teníamos una hora para hacer lo que pudiésemos, y decidí recorrer un poco la ciudad. Probablemente la visitaría en el futuro, parecía un lindo lugar para volver.
-Una buena paliza lo corregirá si sale de la mina.
-¿No puedes ser amable por una vez en tu vida, Iby?
-¿Puedes ser una hechicera decente algún día, mocosa pirómana?
-Tomaré eso como un no... -comenté con tristeza, suspirando, mientras recorría las calles de la ciudad.
Evidentemente Iby estaba causando más problemas que los que solucionaba, si es que solucionaba alguno. Parecía imposible ese sueño que tenía de ser obedecida por aquel espíritu acuático. Una utopía, eso parecía. Un sueño de esos que soñaría durante toda la vida, y nunca se llevarían a cabo. Sabía que Iby estaba obligado a acompañarme hasta que pudiese crecer, pero viendo el día a día ya me imaginaba usando mi báculo como bastón y aún soportando al espíritu que me acompañaba, tal cual era en ese mismo momento.
-Nos veremos allí entonces. Vamos, Iby.
No mucho después de eso, salí junto a Iby de la taberna, sonriéndole brevemente al posadero. Teníamos una hora para hacer lo que pudiésemos, y decidí recorrer un poco la ciudad. Probablemente la visitaría en el futuro, parecía un lindo lugar para volver.
-Una buena paliza lo corregirá si sale de la mina.
-¿No puedes ser amable por una vez en tu vida, Iby?
-¿Puedes ser una hechicera decente algún día, mocosa pirómana?
-Tomaré eso como un no... -comenté con tristeza, suspirando, mientras recorría las calles de la ciudad.
Tsuki Umi- Cantidad de envíos : 127
Re: El tesoro minero (libre)
la joven salio y me tire boca arriba en mi cama, en menudo problema me había metido. Mi plan estaba en marcha pero no sabia como podía salir con ese lagarto y la chica, ademas de no tener total certeza de lo que había en la mina. mi contacto era fiable, pero nadie puede estar seguro de nada en tiempos de guerra.
estuve un rato metiendo las cosas que necesitaba en el bolso y le dije al posadero que le avisara a nuestro transporte que estuviera listo. subí de nuevo a mi habitación, me coloque mi armadura y luego la tape con unas ropas y mi capa. ya estaba todo listo para sumergirme en la primera aventura en Jaspia.
Salí de la taberna y fui directamente hacia la plaza. según mis cálculos faltaban diez minutos para la hora de partida, así que me senté al lado de la fuente. para pasar el tiempo me puse a jugar con unas rocas que las arrojaba dentro de la fuente. Mi concentracion en este vanal tarea se fue cuando escuche una voz que susurraba y a unos caballos, era mi transporte. Salude al conductor y subi en la parte de atras que estaba llena de heno, esto ayudaria a pasar mas desapercibidos.
me quede ahi pero de manera que la chica pudiera verme. Ya era la hora de partir.
estuve un rato metiendo las cosas que necesitaba en el bolso y le dije al posadero que le avisara a nuestro transporte que estuviera listo. subí de nuevo a mi habitación, me coloque mi armadura y luego la tape con unas ropas y mi capa. ya estaba todo listo para sumergirme en la primera aventura en Jaspia.
Salí de la taberna y fui directamente hacia la plaza. según mis cálculos faltaban diez minutos para la hora de partida, así que me senté al lado de la fuente. para pasar el tiempo me puse a jugar con unas rocas que las arrojaba dentro de la fuente. Mi concentracion en este vanal tarea se fue cuando escuche una voz que susurraba y a unos caballos, era mi transporte. Salude al conductor y subi en la parte de atras que estaba llena de heno, esto ayudaria a pasar mas desapercibidos.
me quede ahi pero de manera que la chica pudiera verme. Ya era la hora de partir.
burdalesa- Cantidad de envíos : 49
Temas similares
» Guardián de la Fe [Libre]
» El Heraldo de las Dunas (libre)
» Explorando sin permiso [libre]
» Un camino de tierra ( Libre ).
» De vuelta al origen [Libre]
» El Heraldo de las Dunas (libre)
» Explorando sin permiso [libre]
» Un camino de tierra ( Libre ).
» De vuelta al origen [Libre]
Mar de Jaspia :: DUCADO DE CESSELE :: Kuzueth :: Daosh
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
14/11/24, 09:56 pm por Alma Swann
» El Vals de los Enmascarados
11/11/24, 09:24 am por Luthys
» Adonde me lleven los sueños
04/04/18, 08:55 pm por Lisandot
» Sentimientos encontrados
22/02/18, 10:03 pm por Songèrie
» El fin de un viaje y el comienzo de otro.
04/02/18, 03:16 pm por Florangél
» Vini, saquei, marchi
30/01/18, 06:23 pm por Narrador
» Rumbo a Moselec (Trama 3)
30/01/18, 06:01 pm por Narrador
» Trama 3 . Se reclutan piratas y maleantes varios
30/01/18, 05:58 pm por Narrador
» Vestigios del pasado
30/08/17, 06:51 pm por Auria